El sábado 27 de noviembre he tenido estreno por partida doble: mi primera carrera por montaña y mi primera media maratón. Dos en una. ¡Fantástico!.
Este fin de semana tenía 2 pruebas de orientación (una de sprint urbano y el campeonato autonómico de media distancia). Pero como las organizaba mi club en Gilet (XIII Trofeo UPV de Orientación), me tocaba participar como organizador (aparcacoches y avituallamiento) (jejeje).
Tenía claro que no podía quedarme sin hacer nada, subiéndome por las paredes. Así que había que buscar una alternativa deportiva interesante para el sábado por la mañana. Y, buscando, me encontré con la carrerita de Castellnovo, que tenía muy buena pinta.
Después de desestimar la media maratón de Valencia por masificación asfáltica (más de 7000 corredores), tenía que hacer una media maratón para cumplir mi objetivo de este año. Y eso es lo que he hecho, pero de montaña. Doble estreno, doble satisfacción.
Para rematar una buena opción, he podido compartir el momento con Enrique Castelló, del club CxM y compañero en la travesía de Córcega, al que le gustó la idea y se animó nada más se lo propuse. Gracias por la compañía.
Son las 8:30 del sábado y hace un frío que pela en la zona de salida, junto al olmo de Castellnovo. Unos 2ºC. No hace viento y la amenaza de lluvia no se ha cumplido.
A las 9:00 salimos 468 participantes. Puf, cuánta gente. La consigna es tomármelo con calma y acabar por debajo de 3 horas. Es un objetivo que creo asequible.
Enrique sale en cabeza, con ganas de correr. Está fuerte este chico. Dice que va a intentar hacer podium.
Los primeros 2 kilómetros son de asfalto. La gente tira con ganas. Yo voy conservador. Prefiero ir lento al principio. Pronto entiendo por qué tanta prisa. La carretera se convierte, de pronto, en una estrecha senda, formándose un atasco monumental. ¡Qué poca previsión y qué poca idea he tenido!.
Pierdo más de 10 minutos, en los que me toca esperar parado o caminar a paso de tortuga. Pido paso a mochileros y corredores lentos, que protestan diciendo que la senda es estrecha. Tendrán que dejarme pasar, digo yo.
Sin llegar a los codazos, consigo adelantar al primer grupo, pongo mi ritmo y pronto me veo adelantando gente. Esto de adelantar es divertido. Una nueva experiencia (jejeje).
Apenas paro medio minuto por avituallamiento para beber alguna cosa. No me hace falta, que las pulsaciones las recupero bien en llanos y bajadas. Estoy que me salgo y me veo muy completo todo el recorrido, adelantando aquí y allá. Técnica del "runner hunting": corredor objetivo localizado (delante), cambio de ritmo, aproximación y adelantamiento (jajaja).
Alrededor del kilómetro 15 me pongo a rueda de dos chavales que me dan paso varias veces. Tranquilos, que ahora ya estoy pensando en acabar (jajaja).
La carrera es muy bonita, con mucha senda, aunque no me creo el 85% que anuncian. Es menos. El terreno me recuerda bastante a la de Chelva, aunque aquí la senda es más estrecha y pedregosa. Una cresta con buenas vistas, pero demasiadas piedras. No me puedo despistar. Los últimos metros, de hormigón, me resultan desagradables.
A partir del kilómetro 19 y pico empiezo a venirme abajo. Lo noto claramente. Quizá el saber que estoy cerca de meta. No sé. Sensaciones extrañas y un dichoso nudo en la garganta que me ahoga lentamente. ¿Ahora?. ¿Y esto?. Me toca caminar 100 metros.
En la misma meta, veo a Enrique que me anima contento. Está sorprendido de mi resultado. Me quito el chip mientras me salta una lagrimilla loca. Lo he conseguido. Por montaña. En cosa de un año y poco de entrenamiento ligero. Poquet a poquet. Soy un fenómeno (y no tengo abuela). Emotivo abrazo con Enrique. Ese nudo en la garganta, que no se va ... demasiadas emociones para un sólo día. Una mañana intensa.
Problemas logísticos varios: el GPS se ha quedado sin batería a los 5 minutos de salir y he roto el talón de las amortiguadas zapatillas que me compré en junio (Gel-trail Lahar) (jajaja).
El recorrido de 20,5 Km y +762 m de desnivel positivo acumulado.
He acabado en 2:37:19, muy por debajo del tiempo que me había marcado (3 horas), aunque creo que podía haber bajado perfectamente de las 2 horas y media sin tanto tráfico inicial. Vaya ... ¿me estoy picando? (jajaja).
Me dicen que en posición 214 de 468, 116 de mi categoría (todavía senior masculino) de 195 (jajaja ... ¡genial!).
Creo que puedo estar más que satisfecho del resultado, siendo un novato.
Enrique ha acabado el 63 en 2:08:55, 23 de su categoría. Está hecho una máquina. Esto es un aperitivo para Chiva, ya verás.
Aunque ... como una carrera de orientación no hay nada, la verdad. No lo cambio (jejeje).
Aaaaayyyy, sino hagueres baixat el Vero amb les peaso sabatilles gore-tex, igual encara estaven vives. Però ¡¡que te quiten lo nadaooooo!!.
ResponderEliminarSALUT
Cèsar.
Dis que sí Cèsar, que me quiten lo nadao. Què bo va ser allò del Vero.
ResponderEliminarAquesta primavera torne a Alquézar, així que ja t'avisaré que pense que si pots, t'apuntes (jajaja).