Se trata de una carrera popular de 8,20 Km y +276 m, en la que se sube a una colina cercana, donde se ubican los conocidos molinos que conserva esta localidad.
Como no tenía nada mejor que hacer y la distancia me parecía más que razonable, decidí apuntarme y ver qué pasaba.
Llegado el día, me armo de valor. No sólo nos han dado previsión de tormenta, sino que además el cielo no hace sino que confirmar las previsiones. Si llueve como lo ha hecho esta mañana por Calderona, me voy a divertir (jejeje).
Poco a poco va llegando la gente. Somos unos 150 participantes. Conozco alguno de vista y en especial a la gente de atletismo de la UPV (Carol y demás). Aquí parece que hay algo de nivel. Espero no llegar el último (jajaja).
Hace fresco en la zona de salida. Unos 18ºC. Parece imposible que estemos en pleno agosto.
Salimos puntuales desde la puerta del Mesón. Empezamos a trotar y pronto empiezan a caer pequeñas gotas de agua que se transforman en una ducha ligera que tiene visos de convertirse en torrencial aguacero.
Cruzamos las calles de Alcublas, dando la vuelta al pueblo y empezamos la subida a los molinos por la ladera oeste. En la subida (asfaltada) se me unen varias personas a "mi sombra" (¡quita bicho, quita!).
Yo mantengo un ritmo constante desde la salida y saco más velocidad en las cuestas que el resto de corredores. Alguno me da conversación (jajaja). Voy adelantando grupitos sueltos que se frenan en la cuesta. Me sorprendo a mí mismo. Cuando me quiero dar cuenta, llevo más de 10 corredores detrás mío. Ni que fuera una liebre (jajaja).
Al llegar al collado, giramos a la izquierda para coger el cortafuegos. Tiene bastante pendiente y muchas piedras. Aquí la mayoría decide caminar. Yo les voy pasando, alternando la carrera con caminar a grandes zancadas. Voy ligero. Ha empezado a arreciar y estamos en pleno diluvio universal.
Cerca de los Molinos empiezan a verse relámpagos. Tengo la gafas completamente empañadas y cubiertas de gotitas de agua. No veo nada más allá de 10 metros. Maldigo la hora que me he dejado la gorra en casa. Le damos la vuelta a los Molinos y encaramos una pista que baja hacia la ladera este. Empieza a haber agua por todos lados. Parece una marjal.
En la bajada empieza a adelantarme gente. Aunque voy corriendo, no llevo tanta velocidad como ellos (jejeje).
A continuación viene un falso llano asfaltado, que realmente tiene una ligera pendiente en bajada. Voy chopado y empiezo a tener frío. Entre la niebla de las gafas y la lluvia veo cómo me va pasado el personal que adelantaba en la cuesta. Pero aún adelanto a gente y voy a buen ritmo para mí (unos 5:15 min/km). Incluso durante un rato me pongo a 4:30 min/km (jejeje).
Vuelve a arreciar la lluvia con ganas y el camino asfaltado se convierte en un pequeño riachuelo. Las zapatillas son una masa de tejido y agua y no oigo más que un "chop chop" constante (jajaja).
Veo caer un par de rayos en los Molinos y otro al frente, junto al pueblo. Uno de ellos ha caído a menos de 250 metros de donde yo estoy. Empiezo a pensar lo peor, así que aprieto el ritmo.
Al llegar al pueblo, nos desvían por lo que debería ser un bonito camino que rodea el pueblo por el este, formando una rambla. Con la que ha caído, aquí se ha formado un torrente que me cubre más allá de los gemelos, casi a las rodillas. Uno de los voluntarios nos indica que tengamos cuidado, que hay piedras y hoyos que no se ven. Es lo que nos faltaba (jajaja).
Intento meterme lo mínimo en el agua, que no tengo ganas de nadar, e intento pasar por uno de los márgenes, subiendo y bajando bancales y corriendo cuando puedo por las tablas de cultivo. Esto es una gymkana en toda regla. Parece una carrera de orientación (jajaja).
Delante mío se cae una chica dentro del agua. No creo que note la diferencia, pues estaría chopada de antes. Se levanta riéndose. Eso es bueno.
Llego a meta con un tiempo de 48:54. Me parece demasiado, pero no puedo pedir más, dadas las condiciones (jajaja).
No queda casi gente en la calle y sólo se ven paraguas. Están todos refugiados bajo los portales, en los garajes o han salido corriendo al coche o al polideportivo.
Me intento proteger de la lluvia bajo un portal y una vecina me sale con una toalla seca. Le agradezco el gesto, pero no se la cojo. Estoy muy mojado y no hay ya nada que hacer, que mejor la guarde para otro. Gracias. El detalle me emociona (puf ... ese nudo en la garganta ...).
Las sensaciones son buenas y la lluvia ha sido un elemento nuevo, que le ha dado un toque divertido a la carrerita. La he disfrutado a lo grande. Estoy muy entero y podría haber corrido un rato más.
Haciendo cola para recoger la botellita de aceite que regalaban, el agua me cubre los tobillos.
Parece que lleve zapatillas nuevas, ya que la lluvia ha limpiado el polvo rojo de Calderona del otro día. Al final me vendrá bien el Gore-tex para estas cosas (jajaja).
En meta, algunos corredores, entre risas y bromas por la lluvia, se quejan a la organización que no tengan bicicletas, para poder completar la triatlón, que de piscina ya hemos hecho más de la que debíamos (jajaja).
Otro se sienta en el suelo, con el agua por los riñones y se pone a remar, entre las carcajadas de la gente.
Otro pregunta por la piscina, para darse un baño. Era uno de los alicientes que ofrecía la organización para el final de la prueba, pero nadie esperaba encontrarla durante toda la carrera (jajaja).
En el coche me enrollo en una manta y me intento secar. La toalla se me queda pequeña. Voy hecho un pollo y tengo frío.
Me pongo a cantar a voz en grito el "I'm running in the rain", versión adaptada del "I'm singing in the rain", aunque en la clásica de Gene Kelly no llovía con tantas ganas como hoy.
Empieza a ser costumbre cantarla, que el pasado 10 de agosto, cayeron cuatro gotas mientras trotaba por el río y me arranqué a tararearla entre dientes. Hoy tenía más motivos. La lluvia me pone de muy buen humor y más en verano (jajaja).
He encontrado fotos en este foro. Vale la pena verlas para haceros una idea de la odisea. No salgo en ninguna (jejeje).
Estoy contento, me lo he pasado de maravilla y no he llegado el último. ¿Qué más se puede pedir?. Pues ... completar el día en Chelva, con Mikel y Mari, y en el Kopone, en Calles, escuchando cantar a Santos. Cada día lo hace mejor.
(Post Scriptum 18-ago-2010) Con los días, he encontrado dos vídeos de la carrera.
En el primero, se puede apreciar con detalle cómo estaba el camino antes de meta y unos minutos antes que pasara yo, que iba mucho más crecido (lo que se oye al final es un trueno).
En el otro, aparezco al principio, de espaldas y por casualidad (camiseta roja, se me ve un instante de perfil). Disfrutadlos.
(Post Scriptum 19-ago-2010) Me han enviado una foto en la que aparezco poco después de la salida, corriendo entre las callejuelas de Alcublas. Gracias, Carol.
Os la pongo para vuestro disfrute. Es fácil identificarme: por tamaño, forma y color (rojo) (jajaja).
En el primero, se puede apreciar con detalle cómo estaba el camino antes de meta y unos minutos antes que pasara yo, que iba mucho más crecido (lo que se oye al final es un trueno).
En el otro, aparezco al principio, de espaldas y por casualidad (camiseta roja, se me ve un instante de perfil). Disfrutadlos.
(Post Scriptum 19-ago-2010) Me han enviado una foto en la que aparezco poco después de la salida, corriendo entre las callejuelas de Alcublas. Gracias, Carol.
Os la pongo para vuestro disfrute. Es fácil identificarme: por tamaño, forma y color (rojo) (jajaja).
(P.S. 21-ago-2010) Y he encontrado otro blog con la crónica y muchas fotos: el de la Asociación Cultural Las Alcublas (ACLA). Aunque sigo sin encontrarme en ninguna, aparte de la de Carol (jejeje).
Mario estoy totalmente de acuerdo contigo, la carrera estuvo genial, correr con la adrenalina generada por el riesgo de morir electrocutado por un rayo le imprimió un aire especial a la prueba. Estoy segura de que el año que viene seremos muchos más. Carol
ResponderEliminarGracias, Carol, por el comentario y por la foto.
ResponderEliminarEstuvo genial la carrera y fue una suerte encontrar caras conocidas entre los participantes.
Cuando ví caer el rayo a pocos metros de donde estaba, sobre los molinos, me entraron todas las prisas del mundo. Cuesta abajo voy lento, pero esta vez parece que estaba haciendo un sprint (jajaja).
Y luego el "río". Nos faltó la piragua. Simplemente genial.
Si el año que viene vuelven a contratar la lluvia, me apunto para correrla (jajaja).
Qué forma de disfrutar y qué buen sabor de boca me quedó.
Hasta la próxima.
buena cronica. excelente. yo soy el mono del video 1, para mas señas. jajajajaja. a ver si nos conocemos en una de estas. un saludo. quique martin
ResponderEliminarHola, Quique
ResponderEliminarNo sé si seré capaz de reconocerte. En el vídeo estás muy "transformado" (jajaja)
Soy muy novato en esto, pero poquet a poquet vamos haciendo algunas cosas. La próxima, mañana en Siete Aguas. Mi primer gran fondo (15 km). Tiemblo sólo de pensarlo (jajaja).
Hasta pronto.